Imagine la siguiente situación en un futuro. Un coche autónomo que transporta a una persona se va a estrellar contra un muro. Si gira para salvar el impacto, arrollará a una mujer que cruza la calle en ese momento. Esas decisiones las tomará, en cualquier caso, una inteligencia artificial. Inevitablemente, la situación acabará o con un conductor estrellado o con una mujer atropellada. Pero, ¿quién es el responsable de la catástrofe? ¿El qué diseña la inteligencia artificial o el qué la fabrica?
Ese es uno de los ejemplos que se han puesto este viernes en el III Congreso de Inteligencia Artificial de Alicante, donde se ha llegado a una conclusión: «La regulación debe potenciar a la inteligencia artificial». «La IA no es una tecnología al margen del derecho. Su horizonte es la garantía de los derechos fundamentales», ha defendido el experto en derechos digitales Ricard Martínez durante el debate sobre los límites éticos y legales de esta tecnología.
Martínez, que dirige la cátedra de Privacidad y Transformación Digital Microsoft de la Universidad de Valencia, cree que algunos juristas se han convertido durante la pandemia en «voceros de la catástrofe», contradiciendo a las Administraciones en decisiones como la de los confinamientos. «Esto es intolerable, Salud Pública actúa en base al derecho». Respecto a la inteligencia artificial, ha remarcado que se trata de una tecnología que no es posible «sin confianza». Por eso, considera que los reguladores deben mirar a las capacidades de la IA y no solo a sus riesgos.
Después, el diputado popular Juan Luis Pedreño ha definido a la inteligencia artificial como una tecnología «muy diferente» a las habituales. «Un robot es determinista, está programado, pero la inteligencia artificial no está determinada, sino que se les programa unas reglas y se le suministra unos datos y se adaptan al entorno. Si la IA hace algo que desde la sociedad no está permitido, no tiene porque ser un error de la IA», ha explicado.
El congresista ha detallado que por ahora no existen en el mundo regulaciones sobre la IA. Solo recomendaciones. Por eso, una futura regulación sobre la IA deberá ser «flexible y dinámica» y deberá priorizar en ella la intervención humana.
«Un escenario ideal para los delincuentes»
Campañas de desinformación, ataques a infraestructuras, venta de material sanitario falso, falsas campañas de donación… Estos delitos son sólo algunos de los que ha detectado la Policía Nacional durante la crisis sanitaria. Casimiro Nevado, inspector del Cuerpo policial y experto en ciberdelincuencia, considera que la pandemia es un «escenario ideal para los delincuentes». Los hackers y los criminales que se aprovechan de esta situación invierten sus beneficios en potenciar sus recursos tecnológicos.